Más rápido, más alto, más fuerte…, el lema del olimpismo internacional establecido en 1894 nos remite, no sólo a la superación de los límites físicos del cuerpo humano a través del deporte, sino también a considerarlo un catalizador para una progresiva mejora moral. Años más tarde, Vostell proclamó que es en los actos morales donde reside la belleza, buscando para la vida otras formas de beldad a través de sus obras, identificadas con el ejercicio de la conciencia y la bondad.
Es el territorio común del deporte y del ejercicio de la moral el que Vostell quiso visibilizar participando en la carpeta de obra gráfica SUITE OLYMPIC CENTENNIAL, en 1992. El Comité Olímpico Internacional (COI) le invitó, junto con otros cuarenta y nueve artistas de los cinco continentes, a participar en la celebración del centenario de su fundación, creando una obra que expresara su visión del olimpismo. Las obras originales se exhiben desde entonces en el Museo Olímpico de Lausana (Suiza) pero, a partir de ellas, se editó una serie de 250 ejemplares de una carpeta con 50 estampas (litografías y serigrafías). El Archivo Happening Vostell guarda uno de aquellos ejemplares.
Una nueva cita olímpica se está desarrollando en París en julio y agosto. Además del lema centenario, la consigna parisina de los Juegos es Abramos a lo grande los Juegos. La grandeza de la excelencia, la amistad, el respeto, lo no importante, reside en el espíritu Fluxus y el Museo Vostell Malpartida es un lugar en el mundo donde esta filosofía se hace presente. Son valores universales que este rincón del planeta comparte con el olimpismo. Un lugar donde tiene cabida la idea de asociar el deporte con la cultura y la educación.